“Estas estaciones de servicio no han parado de crecer en los últimos años en todo el territorio nacional. Este incremento en los puntos de venta no se ha visto traducido en un crecimiento en el empleo del sector ya que este tipo de gasolinera destruyen empleo, de hecho, cada gasolinera desatendida abierta supone la destrucción de 6 puestos de trabajo en el sector” ha explicado Francisca Ramírez, Secretaria General de FICA UGT Almería.

La responsable sindical ha señalado que “desde UGT venimos reivindicando la necesidad de que la regulación de las estaciones de servicio desatendidas se efectúe desde el ámbito nacional mediante una ley específica. La norma debería recoger necesariamente la obligatoriedad de que todas y cada una de las gasolineras de nuestro país por motivos de seguridad cuenten con, al menos, una persona de servicio las 24 horas para atender al público”.

A este respecto, Francisca Ramírez ha afirmado que “introducen un elemento de discriminación con las personas con discapacidad, que pueden ver limitado su acceso al servicio. Sin olvidar el peligro que suponen este tipo de gasolineras que dejan en manos de los usuarios el repostar, ante posibles derrames y otros accidentes”.

Finalmente, ha reiterado que “es necesaria la presencia de trabajadores en las estaciones de servicio, por su profesionalidad y formación, de cara a la atención a los usuarios con un objetivo primordial de contribuir al mantenimiento del empleo”.