La degradación térmica combinada de alperujo (un subproducto de la producción de aceite de oliva) y de residuos plásticos mediante pirólisis aumenta la efectividad del proceso y genera nuevos productos de valor añadido como biocombustibles, según un nuevo estudio. El hallazgo es un buen ejemplo de aportación a la economía circular.

La economía circular busca minimizar el desperdicio y maximizar el uso de los recursos existentes. Revalorizar los subproductos y residuos permite obtener beneficios económicos, al mismo tiempo que reduce la dependencia de combustibles fósiles cuando permite generar combustibles renovables. Beneficia al bolsillo y al planeta.

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